jueves, 18 de octubre de 2012

¿Te faltan motivos para NO ir a la manifestación?


¡Qué pesados son estos del comité!  Cuando no montan una asamblea, es una huelga o una manifestación. Pero hasta ahora me he librado de ir. Como no me señalo, seguro que la Dirección lo tiene en cuenta. O eso creo, porque el otro día despidieron a alguien que, como yo, agachaba la cabeza.
¿Qué excusa invento ahora para no ir a la manifestación?

¿Cómo voy a esgrimir que se pelean entre ellos si han conseguido ponerse de acuerdo con los comités de otras empresas y montar una asamblea de comités TIC que en pocos días ha sacado un manifiesto y ha convocado una manifestación?
¡Una manifestación y además fuera del horario laboral!, pero si eso mismo es lo que le dije a Gloria que propusiera en una asamblea (a la que yo no pude ir, como siempre), porque me parecía excesivo hacer una huelga. ¿Cómo no voy a ir a la “manifa”, dónde va a quedar mi coherencia? En fin, espero que Gloria no se acuerde de aquello.
Una buena razón para no ir es que ese día llueva. Yo soy muy delicado y cuando me mojo un poquito enseguida me resfrío. No “cari”, no es el tabaco ni que no me abrigue, es que soy de secano. Total si tan mal no estamos como para manifestarlo públicamente. A ver, voy darle un repaso a mi situación:
·         Sí de acuerdo, no me han subido el sueldo desde hace tiempo, pero yo me apaño. Es el banco el que me aprieta con la hipoteca y el Gobierno con la subida del IVA. Con una subida iría más holgado, pero no importa porque así valoro las cosas en su justa medida. Llevaba mucho tiempo viviendo por encima de mis posibilidades. Menos mal que de vez en cuando me dejo caer por casa de mis padres y les lloro un poco, porque si no, no sé cómo iba a llegar a fin de mes.
·         A mí me tocaba ya un trienio, pero eso es el chocolate del loro, una mamandurria.
·         El variable, el variable se lo pueden meter… porque había cada uno que se llevaba un dineral sin dar un palo al agua durante todo el año. Sí, a mí me permitía devolver parte de los préstamos que me dan mis padres, pero bueno soy su hijo, ¿no? Ya les pagaré cuando pase la crisis. Porque seguro que todas estas medidas del Gobierno son transitorias. ¿Y si no lo son? ¡Fu! Espero que mis padres vivan muchos años… ¿Qué será de aquellos que no tienen quién le ayude o que tienen que ayudar a parte de su familia? Mejor no lo pienso, no, porque jamás me veré en esa situación… bueno, no estoy tan seguro pero como sea yo quien tiene que ayudar a la familia, cruda la llevamos.
·         Que no nos dejan salir a desayunar, ¿y lo que me estoy ahorrando? Bueno eso sí, lo desayunar en casa a las siete para no estar toda la mañana muerto de hambre aún me cuesta. Y eso que, desde que estoy en el edificio de Ayesa, pillo un café y un dulce. Nunca mejor dicho lo de “pillar”, porque en cuanto entra el que trae el carro y grita ¡buenos días!, hay que ir  más rápido que Alonso. Y es que los compañeros, por mucho que se quejaran cuando nos quitaron el tiempo de desayuno, se tiran en plancha a por la bollería, que parece que pasan hambre. Todos no, hay uno, creo que del comité, que cuando llega el carro se va a la máquina expendedora y saca un café. El otro día le pregunté que si es que no le gusta el café del carrito, me respondió que le repugna. No sé porqué, no está tan malo.
·         Que están despidiendo a compañeros, ¿compañeros? Si son todos jefecillos. Bueno, la programadora aquella que se sentaba detrás de mí y no levantaba las manos del teclado no era jefa precisamente. ¡Ah!, también me dejo a Pepe, a Miguel, a Carmen, a… son muchos. Lo que los lloramos el día que los despidieron y lo poco que nos acordamos de ellos, ¿cómo les irá? Seguro que ya han encontrado trabajo y están mejor que aquí, porque yo no me creo lo que dice el comité de que el resto de empresas TIC están igual o peor que la nuestra, que, por cierto, ya no se va llamar SADIEL. Hay que ver, ¡tantos años que fuimos “Sociedad Andaluza…”! Y ahora nos ponen un nombre en inglés. ¿Cómo es? Sí, Ayesa Advanced Technology. ¡Qué nivel!
·         Lo que no llevo muy bien es eso de tener un mes más de jornada de mañana y tarde en verano, pero así me ahorro el aire acondicionado en casa.
·         Lo del RODAS y el horario de presencia obligatoria es hasta bueno, que había mucho que se escaqueaba. No me extraña que la Dirección desconfíe de sus trabajadores.
·         Que me pueden mandar a Chile o México. No hombre, no, a mí no. Yo tengo un bagaje en los proyectos de aquí que si falto… Bueno sí, en mi misma situación estaba Jesús y lo largaron de la noche a la mañana junto con su familia al otro lado del charco.

Que no, que no, que no hay razones y a mí no me mueven para andar gritando por la calle como uno de esos indignados perroflautas. Además, la manifestación es a las 19:30 h  y a esas horas yo prefiero hacer horas extras que seguro que si lo doy todo por la empresa a mi no me van a echar, aunque a Andrés que se hartaba de hacer guardias lo echaron el verano pasado, pero seguro que era por otra cosa...

Compañero/a, hasta aquí la ironía. Bien sabes cuál es la realidad: inestabilidad laboral, trabajo basura, salarios miserables, carestía de vida, un sistema de trabajo que conduce a muchísimos compañeros al estrés, la ansiedad y la depresión, desempleo, exclusión social. Esta es la espada de Damocles que los trabajadores tenemos sobre nuestras  cabezas. En nuestra pasividad está el perpetuarlas; en nuestra acción y unión está el invertirlas.
Es momento de dar pasos para ganar dignidad, futuro y vida. Démoslos pues acudiendo a la manifestación del jueves 18 a las 19:30h (te adjuntamos cartel).
Todos somos responsables. Si nos desentendemos  seremos cómplices del empeoramiento de nuestras condiciones, de la degradación de nuestros salarios,  de los despidos… incluido el tuyo. Defendamos nuestros intereses como trabajadores.

El jueves tienes un paso importante que dar.
Eres responsable de darlo. Debes darlo. Estás obligado a darlo.
¡Todos a la manifestación!

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